250 · ¡Es increíble! Lo confundido que puede estar uno sin darse cuenta. Y de pronto ver la luz..., tan clara.
251 · Este preciso momento podría ser el más importante de mi vida —o de la tuya—, podría ser extraordinariamente importante y significativo... O puede pasar de largo como cualquier otro momento.
¿De qué puede depender, sino de uno mismo?
252 · Las “formas de vida” dependen de las convenciones, y éstas siempre —por definición— pueden ser establecidas o cambiadas convencionalmente.
SIEMPRE SE PUEDE establecer una nueva convención, y ésta cambiará el mundo.
Moraleja: no necesitamos acudir a las esencias de las cosas.
253 · Todo es más difícil de lo que creemos. Pues, cuando hablamos, incluso cuando pensamos, lo hacemos mediante cierto lenguaje que necesariamente hemos heredado: el lenguaje nos posee y es ÉL el que habla a través de nosotros. Y el lenguaje está —como sabemos— cargado de engaños y mentiras, de realidad que no es "real", etc... La única manera de escapar es no hablar y no pensar (es eso lo que está detrás de ese conocido "silencio místico"), o, la otra alternativa, es hablar y pensar INVENTANDO EL LENGUAJE CADA VEZ (así como el niño se inventa sus juegos..., y cuando deja de inventarse, cuando empieza a jugar a lo mismo que juegan los demás, entonces deja de ser un niño)...
251 · Este preciso momento podría ser el más importante de mi vida —o de la tuya—, podría ser extraordinariamente importante y significativo... O puede pasar de largo como cualquier otro momento.
¿De qué puede depender, sino de uno mismo?
252 · Las “formas de vida” dependen de las convenciones, y éstas siempre —por definición— pueden ser establecidas o cambiadas convencionalmente.
SIEMPRE SE PUEDE establecer una nueva convención, y ésta cambiará el mundo.
Moraleja: no necesitamos acudir a las esencias de las cosas.
Sin embargo, constantemente tengo la impresión de que, en este escrito, no satisfago ese "consejo"...
254 · Estas últimas semanas me veo atacando posturas que yo mismo defendía hace uno año; y me veo defendiendo lo que hace uno año me resultaba falto de perspectiva. Sin duda, lo que ha cambiado es MI perspectiva. No tengo la sensación de que antes estuviera "equivocado", como si una falsa "verdad" hubiera sido remplazada por otra más verdadera. La sensación es la de haber cambiado algunos puntos de referencia, de modo que lo "importante" ha transitado de un lugar a otro. No tengo la sensación de haberme quitado un velo que antes me impidiera ver bien, tampoco la de haber cambiado de velo; sino la de haberlo movido un poco, o la de haber deslizado los ojos para cambiar de aperturas. El mundo, por fuerza, sigue siendo el mismo; y yo sigo siendo el mismo también. Lo que ha cambiado es, solamente, mi discurso; es decir: el lenguaje puesto en "acción" a través de mí; es decir: lo único que ha cambiado es MI COMPORTAMIENTO. Y por eso se trata de un cambio importante.
255 · Hace sólo unos días decía de mí mismo que había experimentado un cambio en cierta manera de pensar o de ver ciertas cosas. Hoy, sin embargo, tengo más bien la sensación de "estar cambiando", en pleno "tránsito". Es algo que noto claramente en el hecho de no saber hoy pronunciarme al respecto de casi nada. Es un momento de "transnomia", donde 1) creo estar dejando atrás ciertos valores y pareceres, pero 2) aún no he logrado consolidar otros nuevos. Del punto 1) estoy cierto porque la necesidad del cambio es algo "sentido" (mis valores y pareceres han cambiado de hecho); del punto 2) estoy cierto porque aún no soy capaz de tomar una decisión.
Ahora mismo me recuerdo al perro que permanece sentado con la cabeza erguida, mirando al horizonte, y que permanecerá así mientras no aparezca un nuevo estímulo, sentimiento o señal que le empuje en alguna dirección.
Esto quiere decir: "Puedes estar tranquilo. Sea lo que sea, la señal aparecerá, y la dirección estará clara". Es decir: "No puedes equivocarte".
256 · En el centro de Berlín, cientos de turistas se hacen fotos a diario junto a la estatua de Marx y Engels. Y éstos no dicen nada porque son de bronce.
257 · La tristeza existe, pero ¿qué significa? Un buen amigo se ha ido para siempre. Casi no nos veíamos (como mucho dos veces al año), pero era un buen amigo: alguien en quien siempre podría confiar, alguien a quien, de necesitarlo, podría seguir a cualquier parte con los ojos cerrados. Ahora sé bien que eso es mucho. No importa lo lejos que estuviera. Un amigo es un amigo siempre y en cualquier parte. Y no importa que tengamos más amigos y mejores amigos, porque la existencia de esta persona sobre la Tierra era un bien en sí mismo. Tengo muchos amigos dispersados por el globo, con los que tengo poco contacto y, sin embargo, su sola existencia me reconforta, saber que están ahí. Saber que hay ciertos lugares en el hostil mundo en los que hay alguien que me recibirá con un abrazo y me hará sentir como en casa con mi hermano. Mi amigo vivía en Tenerife. Allí tenía yo un amigo. Ahora ya no está, ni en Tenerife ni en ninguna parte... Por ello ahora el mundo es, para mí, un lugar peor que hace solo unos días... ¡Ya le echo de menos! ¡Estoy triste!
258 · El mundo está como está por la codiciosa violencia de unos pocos, y por la ciega mansedumbre de muchos...
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